Creo que es la primera vez en 30 años que como ensalada de lentejas. De hecho, recuerdo la primera y única vez que la probé, un verano que pasé con mi tía “la de Francia” en una casa rural en medio de la nada del país galo.
Obviamente no me gustó nada, a pesar de que me vuelven loca en potaje. Y aún no entiendo qué motivos he tenido para –casi por inercia- decidirme no solo a probarla otra vez, sino a cocinarla.
Tenía un paquete de lentejas rojas desde hace meses en la despensa, junto a otro de lenteja beluga y una tercera que no recuerdo, y lo que más me llamó la atención es que tan solo unas horas después de tenerlas en remojo ya estaban bastante tiernas, incluso en crudo. Tanto, que un poco más y las preparo tal cual, aunque he de reconocer que el sabor y textura es un poco más agradable tras las breve cocción.
Para 2 personas
1 taza de lentejas rojas partidas
1 taza de gamba pelada
½ cebolleta
½ Calabacín
Pimiento verde
Guindilla verde cruda
5 tomates secos (mitades) en aceite de oliva
1 limón
½ cucharadita de mantequilla
4 hojas de albahaca fresca
Aceite de oliva virgen extra
Sal
La noche anterior, enjuagamos las lentejas varias veces, habiendo comprobado que no tengan piedrecitas, ponemos en remojo las lentejas.
Introducimos las lentejas en un cazo con agua y sentamos en el fuego. Cuando rompa a hervir, cocemos durante 1 minuto. Escurrimos y enfriamos bajo el grifo de agua fría, así impediremos que continúe la cocción. Dejamos en el escurridor para que pierdan todo el agua.
En otro cazo ponemos a hervir agua, con una rodajita de limón y ½ cucharadita de mantequilla. Cuando rompa a hervir echamos las gambas y cocemos durante 2 minutos. Escurrimos bien y reservamos.
Con una mandolina o con un pelador de patatas, laminamos el calabacín y lo ponemos en remojo.
Pelamos la cebolleta, cortamos en medias lunas y ponemos en remojo con agua fría.
Cortamos el pimiento en juliana y lo depositamos con la cebolleta.
Cortamos la guindilla en aritos, retirando las semillas y lo añadimos a los dos anteriores.
Troceamos el tomate seco y picamos la albahaca,
En una ensaladera, juntamos las lentejas y las hortalizas bien escurridas. Añadimos el tomate seco, las gambas y la albahaca.
Aliñamos con el zumo del limón, sal y aceite de oliva.
No he cocinado nunca lentejas rojas pero viendo tu ensalada tan rica me entran ganas jajaaj. besicos